Fórmulas Magistrales vs. Oficinales

Una fórmula magistral es elaborada por un médico y una fórmula oficinal es conocida de forma pública y se expende regularmente en las farmacias comerciales.

Tanto la fórmula magistrales como las fórmula oficinales son preparados que se elaboran bajo la dirección de un farmacéutico en una farmacia y su expendio se debe realizar en envases adecuados con la debida información al paciente sobre su contenido, dosificación, fecha de elaboración y caducidad.

El contenido de la fórmula magistral es de carácter particular, mientras que el contenido del preparado oficinal y la formulación consta en registros públicos.  Sus compuestos y reactivos ya están previamente catalogados por los organismos de control como medicamentos y definidos en sus dosis a utilizar.

La fórmua magistral es para tratamientos específicos y especializados, los preparados oficinales son utilizados comúmente para el tratamiento de síntomas menores que no requieren de una fórmula escrita por un médico, sin embargo, para ambos casos, es exigible que su preparación sea realizada por profesionales farmacéuticos bajo estrictas normas de elaboración, por lo que este tipo de preparados sólo deben ser adquiridos en sitios autorizados.

El preparado oficinal también puede ser un medicamento destinado a un paciente indiviual, que requiere de una personalización de su medicamento, pero difiere de las fórmulas magistrales en que estas últimas sí requieren de una prescripción de un médico responsable de la formulación y que comparte responsabilidad de la misma con el establecimiento farmacéutico que los elabora y expende.

Existen fórmulas magistrales, cuyo uso se ha vuelto tan común, que se denominan fórmulas magistrales tipificadas y caen en el campo de las fórmulas oficinales pues se puede replicar su fórmula para usos específicos tal como se hace con los preparados oficinales.

Ejemplos de preparados oficinales son la loción de calamina, el alcohol iodado, el alcohol mentolado, el permanganato de potasio, talco mentolado, minoxidil al 2%, los polvos pédicos, entre otros, cuya variedad va a depender del país de expendio.

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